
Hoy le toca el turno a Alfama, la zona con más sabor de Lisboa. Para el que la visita, pasear por sus calles deja un recuerdo a cuestas, muchas cuestas, a subidas y bajadas que regalan vistas espectaculares. También a tiempo detenido, a viaje al pasado y a sitio auténtico.
Al caer la noche, el barrio más antiguo de Lisboa garantiza una velada diferente e inolvidable. ¿Preparado para descubrir sus rincones más interesantes? Te contamos cómo aprovechar a tope tus horas de diversión en la capital de Portugal, sin gastar mucho y riendo un montón.
Te recomendamos que para cenar con tus amigos visites alguna de las tascas típicas de Alfama, como la popular, divertida y barata taberna A Baiuca (Rua de Sao Miguel, 20), un lugar donde uno va a sentarse en una de sus largas mesas de cuadros con manteles (para cualquier viajero siempre son garantía de comida rica y casera). Si la noche es especial, la no tan económica O Eurico, Casa de Pasto (Largo de Sãp Cristóvão, 3) es una diminuta y recomendable tasca con sabores que rozan la excelencia.
Los jóvenes lisboetas adoran ir de bares y copas por Alfama, considerado como el barrio más seguro de la capital de Portugal. Cuando tu viaje de estudios te haga volar hasta Lisboa, a ti también te encantará. Acércate a alguno de sus bares más originales, como el Tejo Bar Alfama (Beco do Vigario, 1A), un curioso antro cuyas paredes están llenas de instrumentos que puedes coger y hacer sonar y donde es imposible acabar la noche sin haber hecho un montón de nuevos amigos entre los clientes. Muy divertido.
En lugares como el barrio de Alfama, el pasado no debía de ser muy diferente de lo que el turista puede hoy contemplar. Aprovecha una oportunidad única para salir de marcha por la Lisboa donde aun se hace vida en la calle.
Foto| Eric Hossinger