Entre los grandes atractivos de La Habana -aparte del buen clima, las playas paradisíacas y el espíritu cubano inconfundible en cualquiera con quien pares a intercambiar unas palabras-, se encuentra de forma muy destacada su particular gastronomía. A poco que te dejes ver por esta increíble isla caribeña apreciarás que el yantar forma una parte importante dentro de la propia esencia cubana, y le dan la importancia que se merece desde la primera comida del día: el desayuno.
Los desayunos al estilo cubano son contundentes, cargados de sabor y preparados para aguantar la marcha a lo largo del día (¿conoces aquel dicho popular que sugiere desayunar como un rey? En La Habana se lo toman al pie de la letra). Por lo tanto, el desayuno es la primera ocasión para celebrar una fiesta de sabores por todo lo alto.
En La Habana tienes varias opciones para pegarte un desayuno épico, hacerle unas cuantas fotos antes de hincarle el diente y, si eres capaz, hacer lo propio con el plato vacío. Si para hacer tu viaje a Cuba del todo auténtico has decidido alojarte en una casa particular, el desayuno estará servido desde antes que quieras abrir un ojo. Este tipo de viaje -dormir en la casa de un local- está muy extendido en La Habana dado lo fácil que es integrarse en la cultura local de la mano de un anfitrión local.
Si el desayuno de tu anfitrión no te ha parecido suficiente -pese a incluir zumos naturales, huevos revueltos, frutas variadas y qué otro manjar no-, también puedes optar por pasearte hasta uno de los famosos cafés de La Habana (sobretodo en la zona de La Habana Vieja). Si quieres ir a los más conocidos, tanto El Dandy como El Café figuran entre los nombres más populares…aunque no te costará encontrar otras opciones.
Por último, muchos hoteles ofrecen igualmente buenas opciones para un desayuno en condiciones, tanto para huéspedes como para visitantes. Bien te apetezca un desayuno bufé o a la carta, hoteles como el Hotel Nacional o el Hotel Occidental te esperan de brazos abiertos desde primera hora del día.
El desayuno está servido, ahora solo falta elegir fechas y poner rumbo a La Habana en tus próximas vacaciones.
Foto | Gerald Gaberning