Que haya gente que no sepa que Iberia Joven ayuda a volar a Johannesburgo, al mejor precio y con los mejores descuentos, es una gran, gran pena. La única condición que ponen es ser joven y tener ganas de descubrir nuevos mundos y poderosas experiencias. Por eso, a todo aquel que encaje en estos supuestos, le recomendamos con ahínco seguir leyendo y plantearse un viaje a Sudáfrica.
Volar a Johannesburgo con Iberia Joven es como dejarse llevar hasta el país de las mil maravillas, con episodios y aventuras que solo pueden pasar en África. Para eso está por ejemplo el lago Santa Lucía, situado a unas horas de Johannesburgo y conocido por albergar un entramado de estuarios único en el mundo. Aquí el plan es pasar la tarde navegando entre sus habitantes animales, véase feroces cocodrilos y enormes hipopótamos. Los barcos de las excursiones se deslizan entre decenas y decenas de estos últimos gigantes que, sin prestar atención a la presencia curiosa de los turistas, pasan el tiempo abriendo sus bocas y desplegando sus temibles fauces.
Otro de los atractivos de la zona es el cercano y pintoresco pueblo del mismo nombre, Santa Lucía, un lugar estupendo para alojarse. En él, las probabilidades de tropezarse de noche con algún hipopótamo son ciertamente altas, ya sea comiendo del jardín de un vecino o cruzando una calle sin inmutarse. En esos momentos lo que hay que hacer es mantener la calma, no aproximarse demasiado a la bestia y simplemente, deleitarse con el espectáculo.
Viajar con amigos por Sudáfrica es la fuente de muchas aventuras. Sin ir más lejos, a unas cuatro horas en coche desde Johannesburgo se encuentra el Parque Nacional Kruger, una parada imprescindible dentro de cualquier ruta por el sur del continente negro. A diferencia de otros, en este espacio protegido está permitido montarse el safari por libre, es decir, con vehículo propio y sin guía. Sí o sí Kruger es una atracción a la que hay que dedicarle varios días. En la reserva de caza más grande del continente se pueden ver y fotografiar a los cinco grandes (“big five”): leopardo, león, elefante, búfalo y rinoceronte. Verse las caras con uno de estos animales es un momento único en la vida, emocionante como pocos. ¿Quién dice que los safaris son aburridos?
Estas son dos de las extraordinarias aventuras que pueden suceder en los alrededores de Johannesburgo, ambas cargadas de buenas dosis de adrenalina. África tira, África engancha.
Foto| Rodrigo Paredes
