
El invierno noruego podrá tener muchos atractivos para el viajero invernal: ir abrigadito por sus calles, visitar museos y vivir prácticamente de noche…pero…¿por qué no esperar un poco y tener todo lo contrario? Muchas horas a la luz del día, planes para disfrutar al aire libre e incluso sacar el bañador para darse un baño al más puro estilo oslense.
Porque el verano en Oslo, con el gentío refrescándose en el mismo fiordo que meses atrás está prácticamente congelado, es algo que hay que experimentar de primera mano para poder contarlo. Además, la reciente renovación del puerto central de la ciudad ha añadido un montón de actividades con sus tranquilas aguas como protagonistas.
Uno de los planes a los que puedes irte apuntando es al de cenar en todo lo alto de una de sus azoteas, un plan con espectaculares vistas a toda la ciudad. Una de las más chulas para conocer es The Thief Roof, con muy buen ambiente y espacio suficiente para contemplar la city desde las alturas al ritmo de carnes y mariscos a la parrilla. Una delicia.
Otro plan diferente con el que aderezar tus días en Oslo consiste en pegarse una sesión de sauna en el centro SALT… que no es, lo que se dice, una sauna normal y corriente. Al contrario (hay que ver lo originales que son estos nórdicos) es una mezcla de sauna con música, gastronomía y arquitectura. El recinto ya es algo fuera de lo común: una especie de anfiteatro en forma de pirámide donde la gente disfruta del calor escuchando a sus dj´s favoritos.
Y ya pensando en pegarte ese refrescante chapuzón que te ayude a sobrellevar el sol nórdico, los puntos en los que lanzarse al agua están repartidos a lo largo y ancho de toda la ciudad (tanto de agua dulce como salada). Una de las zonas mas frecuentadas está en la zona de Frysja, en una zona de cascadas que bajan desde el lago Maridalsvannet.
Otra zona de baños muy popular en Oslo está en la península de Bygdøy, con su playa de arena, rocas y césped para echarse a descansar sin prisa ninguna. O la zona de las islas (con ferrys desde Vippetangen) Hovedøya, Gressholmen y Langøyene.
No te van a faltar planes veraniegos para disfrutar del más auténtico Oslo estival. ¿Quieres vivirlo en primera persona? ¡Estás tardando en reservar tus vuelos a Oslo para este verano!
Foto | Elisabetta Stringhi