Decir que Barcelona es la caña es quedarse muy, pero que muy corto. Siendo una de las ciudades más abiertas y multiculturales de Europa, en Barcelona (Barna para los amigos) no hay prácticamente un rincón donde no se respire un ambientazo único.
Desde la propia estructura de la ciudad, perfecta para moverse de un lado a otro, hasta cada uno de los cafés y restaurantes que hay en cada esquina, Barcelona es una ciudad para visitar al menos una vez al año. Regalarse el clásico brunch de la media mañana es ya un plan clásico en la ciudad, así que reserva con tiempo para no quedarte mirando como son otros quienes disfrutan de sus huevos benedictinos con salmón ahumado y zumo de naranja natural.
Ya con el buche bien provisto de energías, Barcelona tiene multitud de planes divertidos para quienes ya han hecho check en las visitas obligadas en la ciudad: Sagrada Familia, Barrio Gótico, las Ramblas, etc. Además de todo esto, hay un mundo aparte de actividades con las que rellenar sin apenas esfuerzo una escapada de fin de semana o incluso más larga. ¿Te imaginas de qué planes hablamos? Aquí van algunas sugerencias.
Si lo de pasarte por la clásica bolera en plan Gran Lebowski ya no te parece lo suficientemente original, ¿qué te parecería una sesión de lanzamiento de hacha al más puro estilo vikingo? Apunta bien hacia la diana de madera, carga el brazo y lanza el hacha con todas tus fuerzas. Si ves que esto es lo tuyo, en ti está apuntarte a un torneo y defender el honor de tu pueblo vikingo.
Si para ti más vale maña que fuerza, Barcelona está a rebosar de Escape rooms en las que probar tu inteligencia a la hora de resolver complejos acertijos con tus amigos o familiares (ojo con el cuñado de turno, querrá llevar el mando durante todo el juego). Eso sí, hay Escape rooms para todos los niveles, así que no te preocupes si no eres precisamente un Sherlock Holmes pero quieres probar tus dotes detectivescas.
Para acabar con tu plan de actividades originales en Barcelona, el Big Fun Museum es una estupenda forma de pasárselo bien sin otro objetivo más que el de divertirse. Cuenta con habitaciones temáticas, instalaciones en 3D y laberintos de sobra para echarse unas risas durante un buen rato. Ah, y una piscina de bolas en la que bucear sin complejos.
Barcelona se lo pone fácil a quienes buscan planes originales, ¿a qué esperas para reservar tus vuelos?
Foto | Tiburi