No, no vamos a negar que Suiza no es barato. Sin embargo, existen trucos para que en ciudades como Ginebra, los estudiantes os las apañéis para comer bien y a buen precio.
Los centros comerciales y grandes almacenes de Ginebra son un solución muy socorrida para comer barato. Un ejemplo muy conocido entre los universitarios suizos, estudiantes de intercambio, becarios y jóvenes en general es Manor.
En la última planta del centro comercial Manor se encuentra el restaurante Manora (rue de Cornavin 6). Se trata de un establecimiento tipo autoservicio que sirve toda clase de comida, también platos vegetarianos. Manora es una opción práctica, rápida y fácil en el centro de Ginebra, que además regala unas vistas geniales. Divertido y alegre, siempre animado, no es de sorprender que Manora sea un establecimiento muy popular entre los jóvenes.
¿Habéis oído hablar de Le Radar de Poche? (en rue des Chaudronniers 8). En el local, súper famoso entre los estudiantes, sirven una pasta deliciosa a un precio muy económico, ¡así da gusto! Muy cerca se encuentra el Musée d’art et d’histoire de Ginebra, grande, bien organizado y, lo mejor de todo, de entrada gratuita. Otro de los edificios vecinos es el de la Universidad de Ginebra. Después os podéis acercar a la vecina Place du Bourg-de-Four, una plaza muy animada, repleta de cafés y bares donde quedar para tomar algo con los amigos. Recomendable.
Siguiendo con los restaurantes populares entre los jóvenes en Ginebra; al otro lado del Ródano y a media hora a pie de Le Radar de Poche se esconde el restaurante La Limite, en rue des Charmilles 11. La carta contiene platos de la cocina francesa y suiza más contundente, carne, patatas, pasta… y todo en raciones grandes y generosas. Siempre está lleno, ¡por algo será! La Limite es un secreto bien guardado entre la gente local, alejado de la zona turística, perfecto para estudiantes, becarios, Erasmus…
Como veis, comer barato en Ginebra es un reto algo difícil pero no imposible.
Foto: Cristian Bortes