
Dicen los gallegos que las meigas podrán no existir, pero que haberlas, haylas. Sobre todo si sabes a dónde acudir a buscarlas cuando se acerca la última noche de octubre allá por aquellas tierras de encantador acento cándido: es Halloween, y en la ciudad marinera de Vigo saben muy bien cómo celebrar el tradicional encuentro entre los vivos y los del más allá. Aunque ojo, no les gusta nada que les pongan la etiqueta de Halloween a la primera de cambio.
La fiesta de Samaín – que es su nombre tradicional – cuenta con hogueras, calabazas por doquier y sus propias meigas – brujas buenas con acento gallego-, pero no precisamente por influencia extranjera, sino por una tradición propia con muchos, muchos años en su haber. Como dicen ellos, «esto es Samaín, no Halloween». Y con una fiesta con tanta tradición a sus espaldas, es normal que quieran protegerla a toda costa de la influencia americana. Eso sí, todo aquel que esté dispuesto a disfrutar de la magia nocturna del 31 de octubre es bienvenido en cualquiera de las celebraciones que se organizan para esa noche en la siempre misteriosa ciudad de Vigo.
Los planes especiales para la terrorífica noche de Samaín son de lo más variado en los distintos barrios de la ciudad, celebrándose talleres, mercados temáticos y muchas otras actividades para no dejar de vivir la fiesta de los muertos desde dentro. Incluso hay quien prefiere celebrarlo por todo lo alto navegando por la ría de Vigo en un plan de degustación gastronómica y posterior sarao nocturno bajo la tenue luz de los candelabros.
Al aroma de las castañas asadas, no te extrañe encontrarte por las calles – especialmente en el casco antiguo – con multitud de espíritus caminantes con sus antorchas humeando en la noche. Es la noche de Samaín en Vigo y nadie quiere ser el primero en acostarse. ¿Aguantarás hasta que salga el sol para despedir a los del más allá?
Foto | antonioxalonso