“Brooklyn Flea” es un gran consejo

Dicen de Brooklyn que ya nada le hace sombra, así que no se concibe viajar a Nueva York, visitar Manhattan y no cruzar al otro lado del río, ya sea en bicicleta, andando o en un taxi amarillo tan de cine. Y aunque ya te hemos contado por qué lo consideramos un destino imprescindible para los jóvenes urbanitas y fans de los chollos, en una ciudad como Nueva York siempre hay cosas nuevas que contar. Hoy, queremos recomendarte que no te pierdas un motivo más para visitar Brooklyn: su mercado de pulgas.

“Brooklyn Flea” se ha convertido en todo un fenómeno de masas. Dado que nos encanta etiquetarlo todo, es momento de compartir contigo lo que se esconde tras estas dos palabras o, lo que es lo mismo, las múltiples definiciones de una serie de mercados situados todos en diferentes rincones de Brooklyn, una de las zonas más de moda de Nueva York.

El “Brooklyn Flea” es…

Un excelente plan de fin de semana, cuya versión al aire libre pasa solo de abril a noviembre. Los sábados se celebra en Fort Greene y los domingos, en DUMBO. El mercado cuenta también con sedes en Williamsburg (los sábados) y en Prospect Park, Breeze Hill (los domingos), todas entre las 10 de la mañana y las 5 de la tarde.

Una gran oportunidad para volverse loco comprando, desde ropa de segunda mano a regalos originales. La cita ofrece de todo: comida, ropa, complementos, antigüedades, discos… cualquier cosa usada a la que merezca la pena darle una segunda oportunidad. Toma nota de que del mercadillo de Brooklyn se puede salir comido y bien vestido.

Origen de una de las mejores vistas sobre Manhattan.

Uno de los reductos más retro de la capital, punto de reunión de modernos, tendenciosos y demás fauna neoyorquina. Si lo que quieres es vivir un encuentro cercano con gente local, los mercados de pulgas de Brooklyn son ese lugar.

Acércate a “Brooklyn Flea”, suma de bazares de tesoros. Busca, rebusca y compra bien y barato, que sabemos que te gusta. Vuelve a casa con alguna pieza irrepetible que te recordará para siempre los buenos momentos vividos en Nueva York, ya sea durante esos meses de estudio en la universidad o durante los días de un viaje de película con amigos.

Foto| Brooklyn Market.