Es un de los destinos predilectos en los programas de trabajo en el extranjero: es soleado, hay fiesta para aburrir y tiene kilómetros y kilómetros de playa. Estamos hablando de Miami, y más concretamente, de South Beach (Sobe, como suele conocérsele entre sus moradores). El destino perfecto cuando el cuerpo pide crema solar, calorcito y nada más que el sonido de las olas rompiendo tranquilamente en la arena.
South Beach es la zona costera por excelencia en Miami, y está separada de la ciudad por Biscayne Bay (la bahía en la que se encuentran las famosas islas donde las celebridades pasan sus vacaciones). El paso desde el downtown hacia la zona de playa parece enviar un mensaje a quienes cruzan las aguas de la bahía sobre el famoso puente McArthur: sed bienvenidos a la buena vida.
Y no es para menos. South Beach es un constante ritmo de turistas, vividores y alguna que otra celebridad dedicándose a lo que a todos nos gusta: tomar el sol, disfrutar de los mejores restaurantes y salir de fiesta para vivir la noche tan característica en South Beach. Pocas preocupaciones más allá de tener que pensar en el siguiente plan para pasárselo pipa.
Entre las zonas que no te puedes perder comenzaremos por Ocean´s Drive, calle plagada de restaurantes en primerísima linea de playa en el extremo más al sur de South Beach. Es la calle en la que se rodaron varias escenas de la mítica película Scarface, además de contar con la casa de la familia Versace entre sus edificios más destacados. Por cierto, muy cerca de Ocean´s Drive está el Nikki Beach, animado local donde podrás almorzar mientras dejas que la pista de baile (en plena arena) empiece a llenarse de caras guapas dispuestas a darlo todo hasta las tantas de la noche.
Otra de las calles principales en South Beach es Lincoln Road, clásica por sus tiendas, bares y restaurantes. Hay también puestos de comida rápida, por lo que un paseo por esta calle peatonal no tiene porqué ser prohibitivo para tus bolsillos. Y muy cerca de Lincoln Road podrás visitar Española Way, un clásico de la tradición hispana (mezclada con toques mexicanos, brasileños y todo aquello que podamos considerar caribeño).
Las dos avenidas principales que no te cansarás de caminar son Collins Avenue y Washington Avenue, ambas corriendo en paralelo a la costa. Igual que Lincoln Road, están repletas de discotecas, restaurantes, comercios de todo tipo y más de un estudio de tatuaje (cuidado con dejarse llevar por la locura de South Beach y salir de allí con un tatuaje difícil de explicar).
Volviendo a la bahía, es el lugar perfecto para alquilar unas motos de agua e ir recorriendo isla a isla durante el tiempo que necesites para echarle la foto de rigor a alguna de las celebridades que suelen pasar sus días de relax por allí, Puf Daddy, Jennifer López o el mismísimo Saquille O´neal, entre muchos otros.
También habrás escuchado hablar de los enormes centros comerciales de Miami (en inglés, malls), pero no esperes encontrar ninguno en South Beach si quieres volver cargado de ropa de marca a precios de outlet. Para esto deberás dedicarle al menos una larga mañana (y tal vez parte de la tarde), y alquilar un coche para llegar hasta ellos. Uno de los más conocidos es el Dolphin Mall, con cientos de tiendas en eternas rebajas.
South Beach lo tiene todo, así que no dudes en ir planeando tu viaje a Miami si quieres pasar unos días de diversión garantizada. Y para los más fiesteros, no perdáis de vista el festival costero por excelencia en Florida: el WMC.
Foto | Ventdusud
