Florencia es uno de los destinos más deseados por los jóvenes, tanto en verano como todo el año. Aprender el italiano, estudiar, hacer un Erasmus… nos encanta hablarte de esta ciudad italiana tan artística, una donde la vida es bella.
En esta ocasión queremos pensar en verde y te vamos a relatar todo lo que siempre has querido saber sobre uno de los mejores espacios de ocio de Florencia. En concreto nos referimos a Cascine, nada más y nada menos que el parque urbano más grande de Europa. Su lengua verde lame toda la orilla del río Arno desde el «Ponte della Vittoria» hasta el «Ponte all’Indiano», extendiéndose a lo largo de unos 3.5 kilómetros.
Lo primero que debes planear es una visita al centro de visitantes del parque, localizado en la plaza del Cascine y abierto solo de viernes a domingo. Allí te explicarán todo lo que se puede hacer, que no es poco: el parque cuenta con muchos y amplios espacios verdes donde podrás relajarte, compartir un picnic con los amigos, pasear, montar en bici… Pero sobre todo, el “Parco delle Cascine” de Florencia es un lugar estupendo para hacer deporte. Los entusiastas del “running” encuentran aquí su refugio; por otro lado, en el parque se practica el baloncesto, golf, tenis, fútbol, tiro con arco, pesca, patinaje sobre ruedas… ¿seguimos?
En el parque Cascine de Florencia también existe un hueco para la cultura. Cuenta con un anfiteatro, construido en los años 70, en el que se puede asistir a todo tipo de actuaciones musicales y teatrales, una experiencia muy recomendable. Por otro lado, muy divertido es también acudir al Mercado de Cascine, que funciona de las 8 de la mañana a las 2 de la tarde los martes y en el que encontrarás un poco de todo, desde fruta fresca, pasando por ropa y antigüedades.
El parque Cascine es un interesante y útil pulmón verde en pleno centro de la ciudad de Florencia, una actividad gratis que puedes hacer en la admirable ciudad italiana. Por cierto, a los estudiantes les interesará saber que el edificio principal o Villa Granducale es hoy la Facultad de Agricultura de la Universidad de Florencia. ¡Afortunados ellos que pueden aprender en un entorno tan privilegiado!
Foto| Robert Couse-Baker
